Mi cuerpo tiene marcas, rajaduras de tu paso por él. Me cuesta entender el espacio. De ser tres a ser una. La vida no deja de pasar con esa indiferencia que tienen las aguas de los ríos. Tu silencio tiene el fluir de la corriente sobre las rocas. Aún aquello que permanece aglutinado tiende a no recordar. Allí están las membranas que imprimen los desengaños futuros de la humanidad
En el nombre del padre
el hijo
y el espíritu santo
amén
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